Por David Higgins, MD, MPH, MS, FAAP
Desde el día del nacimiento de su hijo, fui testigo de la enorme felicidad y del peso de la responsabilidad en sus miradas. Lo sé porque estuve ahí, acompañándolos.
Decisiones tomadas con amor
Desde entonces, ustedes han debido tomar innumerables decisiones sobre la salud de su hijo. ¿Qué butaca para el automóvil es segura? ¿Cuándo puedo darle maníes (cacahuates)? ¿Será conveniente proceder con la cirugía? Y yo estuve ahí, acompañándolos, ayudando a reflexionar sobre los pro y los contra de esas decisiones. Fui testigo del amor, el cuidado y la ansiedad con que tomaron esas decisiones.
En el último tiempo, una de esas tantas decisiones parece haberse vuelto más complicada: ¿Debo vacunar a mi hijo? Quiero que sepan que la mayoría de los padres acepta la vacunación de sus hijos sin vacilaciones. Pero otros, como ustedes, tienen dudas. Estas dudas a menudo surgen de alguna publicación viral, un comentario improvisado de un vecino o un extraño que desea sembrar miedo en las redes sociales.
Ahora, sin embargo, se ha dado un cambio incluso más peligroso. Esas mismas afirmaciones sin sustento ya no pertenecen exclusivamente a internet o comentarios no solicitados, sino que provienen de líderes políticos responsables de proteger nuestra salud. Algunas instituciones que antes inspiraban confianza ahora están dirigidas por personas que repiten teorías de conspiración o divulgan información engañosa.
¿En quién pueden confiar?
No me extraña que se sientan confundidos. Ustedes desean lo mejor para su hijo y es lógico que pregunten: ¿En quién podemos confiar?
Cuando los pediatras recomendamos vacunas, pedimos su confianza, no solo porque contamos con una vasta evidencia que respalda nuestra recomendación (y esto es así) o porque tenemos años de capacitación y experiencia, sino porque hemos atravesado esto junto con ustedes.
¿Recuerda esa noche que llamó tarde por teléfono porque estaba preocupado por la respiración acelerada de su hijo? ¿O el momento en que tomé sus manos y les expliqué por qué su hijo debía someterse a un procedimiento de emergencia? Estuve ahí, acompañándolos en esos momentos y, si hablamos de vacunas, pueden confiar que estoy aquí, una vez más, evaluando lo que es mejor para su hijo.
Los pediatras no elegimos esta profesión por una cuestión de fama o dinero, sino porque nos interesa sobremanera cuidar la salud de su hijo, tanto como a ustedes.
No vendemos suplementos, ni desarrollamos marcas comerciales ni tampoco lucramos con el miedo que sienten los padres. Tampoco nos enriquecemos con las vacunas. De hecho, ganaríamos más dinero tratando a niños enfermos con enfermedades prevenibles que protegiéndolos y previniendo enfermedades con las vacunas. Pero eso no es lo que ustedes necesitan y tampoco es lo que nosotros queremos.
Queremos que su hijo esté saludable y sea feliz construyendo fuertes, aprendiendo a andar en bicicleta o consiguiendo su primer trabajo. Es por eso que recomendamos las vacunas. No lo hacemos por una cuestión política ni para beneficio de las grandes compañías farmacéuticas. Lo hacemos por y para su hijo.
Recibir las respuestas que merece
Sé que a los pediatras no nos sobra el tiempo y que conseguir un turno no siempre es fácil. Eso también nos genera frustración. Entendemos que puede ser más fácil buscar respuestas por su cuenta que hablar con nosotros. Sin embargo, estamos comprometidos a reparar los sistemas defectuosos que dificultan conseguir las respuestas que ustedes merecen.
No siempre tenemos una respuesta para cada pregunta. La medicina cambia y la ciencia avanza. A pesar de eso, nunca dejaremos de aprender, escuchar y aliarnos a ustedes para decidir lo que es mejor para su hijo.
Siempre estaremos aquí para ustedes y su hijo
No importa a quién votó, dónde vive o cuáles son sus creencias: ustedes y su hijo siempre recibirán lo mejor de mí. Y si deciden no vacunar a su hijo y su hijo termina en una sala de urgencias con una enfermedad que podía prevenirse, me devastará saber que se podría haber evitado. Pero lucharé por su hijo con todas mis fuerzas. Ya lo he hecho antes.
A medida que las mentiras se difundan, habrá más ruido político y es posible que aumente su confusión. Pero también tendrá noticias nuestras, de sus pediatras, hablando claramente: las vacunas ayudan a que su hijo esté saludable.
Les haremos frente a las posturas sin justificativos, sin importar de dónde provengan. Recibimos sus preguntas de buen grado y los ayudaremos a encontrar las respuestas basadas en la ciencia y la atención compasiva. Porque eso es lo que verdaderamente significan la atención compasiva y fundamentada.
Pedimos su confianza porque siempre hemos estado ahí, acompañándolos en el cuidado de su hijo.
Mire abajo también el mensaje de la presidente de la AAP, Dra. Sue Kressly, sobre la posición de nuestra organización con respecto al calendario de vacunación infantil. (El video está grabado en inglés, pero puede acceder al doblaje al español que provee YouTube en la configuración del video) .
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Acerca del Dr. Higgins
David Higgins, MD, MPH, MS, FAAP, es pediatra general con doble certificación, especialista en medicina preventiva e investigador de servicios de la salud en University of Colorado Anschutz Medical Campus y médico auxiliar de la Clínica de Salud Infantil en Children's Hospital Colorado. El Dr. Higgins es vicepresidente de la División de Colorado de la American Academy of Pediatrics (AAP). También es miembro del Consejo de Pediatría Comunitaria y del Departamento de Epidemiología, Salud Pública y Evidencia de la AAP. Síganlo en las redes sociales como @DrHigginsMD.
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