Por Megan Donahue, MD, FAAP y Victoria McPherson, DO
Como padre, es posible que se pregunte qué contienen las vacunas infantiles, cómo se preparan y si es algo bueno. Hacer preguntas significa que usted se interesa por la salud de su hijo. Verifiquemos los hechos.
¿Cuáles son los componentes o ingredientes de las vacunas?
Antígenos
Todas las vacunas contienen antígenos. Los antígenos hacen que las vacunas funcionen. Éstos estimulan el organismo a crear la respuesta inmunitaria necesaria para protegerse frente a las infecciones. Los antígenos tienen diversos tipos. El tipo de antígeno utilizado en una vacuna es elegido porque los estudios demuestran que es la mejor manera de protección contra una infección particular. Los tipos de antígenos incluyen:
Virus inactivados (o muertos). Estos virus no pueden causar ni la enfermedad más leve. Sin embargo, el organismo todavía reconoce el virus y crea una respuesta inmunitaria para protegerse. Las vacunas contra la
polio, la
hepatitis A y algunas contra la influenza contienen virus inactivados.
Virus vivos atenuados. Estos son muy débiles para causar enfermedades, pero todavía pueden generar una respuesta inmunitaria. Las vacunas vivas atenuadas suelen generar una respuesta inmunitaria más fuerte. Las vacunas contra el
sarampión, las paperas y la rubeola (MMR, por sus siglas en inglés), el
rotavirus, la
varicela y un tipo de
influenza (gripe) contienen virus vivos atenuados.
Subunidad viral. Éstas vacunas están compuestas por un fragmento o porción del virus muerto. Esto generará la respuesta inmunitaria protectora del organismo. Algunas vacunas elaboradas de esta manera incluyen a la vacuna contra la
hepatitis B y el virus del papiloma humano (VPH).
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Bacterias parciales. Las vacunas que contienen bacterias parciales tienen un fragmento o porción de las bacterias muertas para generar una respuesta inmunitaria protectora. Algunas vacunas hechas con bacterias parciales incluyen las vacunas contra la Haemophilus influenzae tipo b (Hib),
antineumocócica,
antimeningocócica y contra la difteria, el tétanos y la
tosferina (DTaP).
Otros componentes comunes en las vacunas incluyen:
Los
conservantes, que evitan que las ampollas se contaminen con gérmenes.
Los
adyuvantes, que ayudan al organismo a crear una mejor respuesta inmunitaria. Los adyuvantes más comunes son las sales de aluminio.
Los
aditivos, que ayudan a que la vacuna mantenga su eficacia mientras es almacenada. Los aditivos incluyen gelatina, albúmina, sacarosa, lactosa, glutamato monosódico (MSG, por sus siglas en inglés) y glicina.
Residuos del proceso de producción de vacunas. Algunos componentes son necesarios para elaborar la vacuna. Aunque estos componentes son eliminados, algunas cantidades residuales (minúsculas) permanecen en el producto final. Según cómo se haya hecho la vacuna, puede incluir cantidades minúsculas de antibióticos (neomicina), formaldehído, proteína de huevo o proteína de levadura.
¿Estos otros componentes de las vacunas son seguros?
Sí. Han sido estudiados y son seguros en la cantidad utilizada en las vacunas. Esta cantidad es considerablemente menor a la que los niños encuentran en los entornos en que viven, los alimentos y el agua.
¿Por qué están estos otros componentes en las vacunas?
Cada uno de estos componentes tiene una función específica, lo que hace que la vacuna sea más efectiva.
El
formaldehído se utiliza para depurar las toxinas de la difteria y el tétanos, o para inactivar un virus. La cantidad minúscula que puede quedar en estas vacunas es segura. Las vacunas contienen cantidades minúsculas de formaldehído, mucho menores a las que su organismo produce naturalmente o de lo que se obtiene de alimentos de consumo diario, como manzanas y peras. De hecho, estamos expuestos a una concentración mayor a
100 veces más de formaldehído de los alimentos y nuestros propios organismos que de cualquier vacuna.
Antibióticos como la neomicina, la polimixina B y la estreptomicina se utilizan en algunas vacunas para prevenir la contaminación bacteriana durante su fabricación. Estos antibióticos son reducidos después a cantidades muy pequeñas o indetectables durante el procesamiento de las vacunas. Las cantidades mínimas de antibióticos en las vacunas rara vez, si es que alguna vez, causan reacciones alérgicas.
Proteína de huevo. Las vacunas de la influenza y la fiebre amarilla son elaboradas a partir de huevos. Por lo tanto, se encuentran cantidades mínimas de proteína de huevo en el producto final. Sin embargo, ahora sabemos que cualquier persona a partir de los 6 meses de edad en adelante puede recibir la vacuna contra la gripe cada año sin sufrir efectos secundarios, incluso si alguien tiene una alergia grave al huevo.
Las vacunas contra el sarampión y las paperas se elaboran utilizando cultivos de células embrionarias de pollo, no en huevos. Incluso la cantidad de proteínas de huevo remanentes en la vacuna triple vírica MMR (sarampión, paperas, rubéola) no suele provocar reacciones en niños alérgicos al huevo. La vacuna contra la
fiebre amarilla es la única vacuna contraindicada para ser utilizada en niños alérgicos al huevo.
Gelatina. Algunas vacunas contienen gelatina para preservarlas contra la liofilización o el calor. Las personas con alergias graves a la gelatina deben evitar aplicarse
vacunas que contienen gelatina.
Aluminio. En algunas vacunas se utilizan sales de aluminio con adyuvantes, una sustancia que aumenta la respuesta inmunitaria a una vacuna. Estas incluyen a las vacunas DTaP, antineumocócica, contra el VPH, hepatitis B, hepatitis A, Hib y antimeningocócica.
Las sales de aluminio se encuentran naturalmente en el suelo, el agua y alimentos como la soja. Tras décadas de investigación, no existe un riesgo significativo asociado con cantidades minúsculas de sales de aluminio en las vacunas. (Puede leer el perfil toxicológico completo del aluminio del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU.
aquí).
¿Todas las vacunas contienen anticongelantes?
No. Los anticongelantes generalmente están hechos de etilenglicol, que es tóxico. El polietilenglicol (PEG) y el etilenglicol que contienen las vacunas suenan similares, pero no son lo mismo. El PEG se elabora a partir de etilenglicol, pero no es tóxico y se utiliza en medicamentos, cosméticos y alimentos. Se utiliza para inactivar el virus de la influenza en algunas vacunas contra esa enfermedad. También se utiliza para depurar otras vacunas.
¿Todas las vacunas contienen timerosal o mercurio?
El mercurio es un elemento que se encuentra naturalmente en el aire, el suelo y el agua. Hay dos tipos de mercurio y son muy diferentes. Uno es el metilmercurio, que puede ser tóxico y del que a veces puede haber rastros en la comida (es lo que sucede con algunos tipos de pescado). Nunca ha sido un ingrediente de las vacunas.
El otro tipo de mercurio es el etilmercurio. Se usa en un conservante para vacunas llamado timerosal y no es tóxico. El etilmercurio fue removido de las vacunas para niños en Estados Unidos hace más de 20 años. Solamente se usa en una de las formulaciones de la vacuna contra la influenza (gripe).
Varios estudios científicos válidos han comprobado que no existe una conexión entre el etilmercurio y el
autismo. La American Academy of Pediatrics (AAP), la Asociación Médica Americana (AMA, por sus siglas en inglés) y el Instituto de Medicina (IOM, por sus siglas en inglés) están de acuerdo en que la ciencia no respalda el vínculo entre el timerosal en las vacunas y el autismo. Lea el informe del IOM
aquí.
¿Las vacunas contienen células fetales?
No. Algunas vacunas implican el crecimiento de los virus en cultivos celulares humanos. Dos líneas celulares proporcionan los cultivos necesarios para producir vacunas. Estas líneas se desarrollaron a partir de dos fetos en la década de 1960. Los fetos fueron abortados por razones médicas, no con el fin de producir vacunas. Estas líneas celulares tienen una vida indefinida, lo que significa que nunca se utilizan nuevos fetos abortados. Los procesos de purificación durante la producción de vacunas dan como resultado que no se incluya tejido fetal en la versión final de las vacunas. Por lo tanto, a los niños no se les inyecta ninguna parte de un feto abortado.
¿Las vacunas deberían contener menos componentes?
La cantidad de cada aditivo utilizado en las vacunas es muy pequeña. De hecho, estamos expuestos a niveles mucho más altos de estos químicos en nuestras vidas cotidianas. En las vacunas, estos componentes son utilizados para hacer la vacuna más segura y eficaz. Cada vacuna es
testeada múltiples veces para tener la certeza de que funciona bien. Eliminar componentes podría afectar la capacidad de la vacuna de proteger a un niño. Siempre se están realizando investigaciones para asegurarse de que los componentes en las vacunas continúen siendo los más seguros y los más adecuados para los niños.
Recuerde
No dude en hablar con el pediatra de su hijo si tiene preguntas sobre su salud.
Más información
Acerca de la Dra. Donahue
La teniente coronel Megan Donahue, MD, FAAP, cuenta con una certificación de la junta en Pediatría General y Enfermedades Infecciosas Pediátricas. Es jefa de la División de Enfermedades Infecciosas Pediátricas en Brooke Army Medical Center y directora asociada del programa de residencia de pediatría para el San Antonio Uniformed Services Health Education Consortium (SAUSHEC). Sus intereses incluyen la educación médica y las enfermedades infecciosas tropicales.
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Acerca de la Dra. McPherson
La capitana Victoria McPherson, DO, es residente de pediatría de primer año en el Consorcio de Educación en Salud de los Servicios Uniformados de San Antonio (San Antonio Uniformed Services Health Education Consortium, SAUSHEC). Sus intereses incluyen las enfermedades infecciosas tropicales, la medicina preventiva y la administración responsable de los antibióticos.
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Nota del editor:
Nadia K. Qureshi, MD, FAAP, también contribuyó a este artículo.
Las opiniones expresadas en este documento son las del autor o los autores y no reflejan necesariamente la política ni la postura oficial de la Agencia de Salud de Defensa (DHA, por sus siglas en inglés), el Departamento de Defensa ni otras agencias del Gobierno de los Estados Unidos.