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Problemas de salud

Defectos cardíacos congénitos en recién nacidos: causas, diagnóstico y tratamiento

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Los primeros días de vida de su bebé son muy preciados. Ha esperado con ansias generar un vínculo con su recién nacido, compartir fotos y prepararse para el regreso a casa. Lo que puede no haberse imaginado es escuchar que el corazón de su bebé no está funcionando correctamente.

Se denomina defectos cardiacos congénitos (CHD, por sus siglas en inglés) a un problema cardíaco presente al nacer. La buena noticia es que un tratamiento oportuno y atención de seguimiento pueden ayudar a los niños nacidos con defectos cardíacos a disfrutar de vidas largas y saludables.

Si está preocupado por el corazón de su bebé que está aún por nacer o si su hijo ya ha sido diagnosticado con un defecto cardiaco congénito (CHD), esto es lo que debe saber.

¿Cuáles son las causas de los defectos cardíacos congénitos?

Los científicos todavía están intentando responder esta pregunta, pero la genética familiar suele jugar un papel importante. Los estudios muestran que los riesgos de un niño de tener defectos cardíacos congénitos son 3 veces mayores si sus padres o sus hermanos también tienen uno.

Los estudios también indican que la genética por sí sola no causa la mayoría de los defectos cardíacos congénitos. La salud de los padres y el entorno también pueden tener un papel importante. Entre las condiciones relacionadas con los CHD, se incluyen:

¿Cómo se puede ver afectado el bienestar de mi hijo por un defecto cardíaco?

Debido a que nuestro corazón bombea sangre que da vida a cada célula de nuestro cuerpo, este órgano es esencial para una buena salud. En la niñez, los defectos cardíacos congénitos pueden interferir con el crecimiento, el desarrollo, el ejercicio y las necesidades nutricionales. En la edad adulta, pueden aumentar los riesgos de infartos, derrames, ritmo cardíaco irregular, problemas de respiración y renales, problemas de salud mental o cáncer.

Los defectos cardiacos congénitos (CHD) también pueden afectar el potencial de aprendizaje de un niño, lo que puede llevar a dificultades en la escuela y en su carrera. Las relaciones con la familia, los amigos, los vecinos, empleadores y otros, también pueden verse afectadas.

¿Cuáles son los distintos tipos de defectos cardíacos congénitos?

Para comprender los defectos cardíacos congénitos, es de gran ayuda conocer cómo funciona el corazón. Las válvulas o puertas se abren y se cierran para permitir que la sangre fluya adecuadamente a través del corazón. Por dentro, dos cámaras reciben sangre que necesita oxígeno, lo que las lleva a los pulmones para una recarga. Otras dos cámaras reciben sangre rica en oxígeno de los pulmones, trasladándola hacia grandes conductos (arterias) que se encargan de alimentar a vasos más pequeños para que la transporten por todo el cuerpo.

Cuando estas estructuras son anormales al nacer, el corazón de un niño puede tener dificultades para funcionar. De hecho, 1 de cada 4 bebés que nacen con defectos cardíacos congénitos, necesitarán cirugía para sobrevivir.

Algunos de los defectos cardíacos congénitos más comunes incluyen:

¿Cómo encuentran los médicos defectos cardíacos congénitos?

Algunos defectos cardíacos congénitos son descubiertos incluso antes de que nazcan los bebés. En otros casos, se encuentran cuando se realizan pruebas de los niveles de oxígeno de un recién nacido o después, durante un examen regular. A continuación, le presentamos algunas de las herramientas utilizadas para diagnosticar CHD.

Un ecocardiograma (ECHO) utiliza ondas sonoras para crear una imagen en movimiento del corazón. Durante el embarazo, en ocasiones se utilizan ecocardiogramas para detectar defectos cardíacos antes del nacimiento.

La oximetría de pulso utiliza un pequeño dispositivo colocado en el dedo, lóbulo de la oreja, frente u otra parte del cuerpo para medir cuánto oxígeno hay en la sangre. Esta prueba se suele utilizar como indicador temprano de que el corazón de un recién nacido está funcionando correctamente.

Los electrocardiogramas (EKG o ECG) les permiten a los médicos estudiar el ritmo de los latidos del corazón para asegurarse de que sean normales y sanos.

Las radiografías de pecho pueden revelar un agrandamiento del corazón. También pueden mostrar si los pulmones están almacenando mucha sangre o líquidos, un posible signo de una insuficiencia cardíaca.

Una resonancia magnética cardíaca puede confirmar un defecto cardíaco o ayudarle al equipo de atención de su hijo a hacer seguimiento a la función cardíaca mientras su hijo crece.

Un cateterismo cardíaco mide la presión y el nivel de oxígeno dentro de las cámaras del corazón y los vasos sanguíneos. Esto puede ayudar a los médicos a revisar si la sangre está fluyendo en la dirección correcta, desde el corazón hasta el resto del cuerpo.

¿Cómo se tratan los defectos cardíacos en los niños?

Algunos niños con defectos cardíacos congénitos no necesitarán tratamiento

Estos niños pueden ser remitidos a un especialista, quien hará seguimiento a su defecto y función cardíaca en el transcurso del tiempo. En otros casos, se puede necesitar cirugía o un cateterismo para reparar el defecto o reducir su impacto.

Tenga en cuenta que la cirugía no es una cura de un solo paso para todos los defectos cardíacos

Algunos niños necesitarán cirugías o medicamentos adicionales (o ambos) para mantener el funcionamiento adecuado de sus corazones. Afortunadamente, existen muchas maneras de ayudar al corazón a funcionar. El equipo médico de su hijo lo orientará para organizar un plan de atención que se adapte a medida que su hijo crece.

Un estilo de vida saludable también es importante

A continuación, presentamos algunas maneras prácticas en que su familia puede comer mejor, moverse más y gestionar el estrés para la salud cardíaca a largo plazo.

Si tengo un defecto cardíaco congénito y estoy planeando tener una familia, ¿qué debería saber?

Asegúrese de que su equipo médico sepa sobre su defecto cardíaco.

Pueden recomendar los pasos siguientes, que pueden incluir asesoramiento y pruebas genéticas. Si ya está transcurriendo un embarazo, su equipo de atención médica hará seguimiento al corazón del bebé y conversará con usted sobre cualquier inquietud. Este artículo proporciona consejos detallados para padres con defectos cardíacos congénitos (CHD) en transcurso de embarazo.

Cuide de usted misma de manera excelente

Puede reducir las probabilidades de que su hijo nazca con un defecto cardíaco congénito (CHD) al alimentarse bien, mantener un peso saludable y evitar el tabaco (si fuma, intente dejar de hacerlo). Si vive con diabetes, siga su plan de gestión médica al pie de la letra. Hable con su equipo de atención médica sobre las recetas y los productos químicos que debe evitar.

Gestione su estrés

Es normal preocuparse por el corazón de su hijo aún por nacer, pero permanecer tranquilo es la opción más saludable para ambos. A continuación, presentamos algunos consejos para aliviar el estrés mientras espera conocer a su recién nacido.

Más información


Última actualización
5/19/2025
Fuente
American Academy of Pediatrics Section on Cardiology and Cardiac Surgery (Copyright © 2025)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
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